THEE SILVER MT. ZION MEMORIAL ORCHESTRA: LA TEORÍA DEL CAOS

29 septiembre, 2014 4:11 pm Publicado por  2 Comentarios

Thee Silver Mt. Zion Memorial OrchestraKafe Antzokia, Bilbao

Vivimos en una isla llamada Montreal y armamos tanto ruido porque nos queremos los unos a los otros". No es el manifiesto de ninguna secta de piraos visionarios capaces de inmolarse en cualquier momento, sino las enigmáticas palabras de un niño que introducen el primer tema de ‘Fuck Off Get Free We Pour Light On Everything’, el último disco de los canadienses Thee Silver Mt. Zion Memorial Orchestra, proyecto coral con miembros de los iconos post rock Godspeed You Black Emperor!, con apariencia de comuna hippie y diversas mutaciones en el nombre que reflejan su vocación nómada.

Y pensar que toda esta historia se inició a raíz de la muerte de una perrita llamada Wanda, la de Efrim Menuck, que por aquel entonces vivía obsesionado con la idea de aprender teoría musical y dar rienda suelta a las composiciones que no encajaban en su banda madre. Este propósito tan loable sonaría muy bien en las entrevistas y demás, pero al de poco tiempo decidió que prefería ir a su bola y no tener ni puñetera idea de lo que estaba haciendo, como aquellos que salen de fiesta con la intención de recogerse pronto y vuelven al día siguiente. Nunca está de más incluir una cierta dosis de desorden.

Da igual lo rara o insólita que sea una propuesta, siempre habrá por ahí fans de algo, la exclusividad en cuanto a gustos en los tiempos actuales se antoja un suceso tan poco común como los cerdos volando. Por eso mismo, de entre la nada surgió la cantidad aceptable de unas cincuenta personas, toda una exageración teniendo en cuenta que hablábamos de una música carente de cualquier atisbo de comercialidad y con cortes que superan tranquilamente los diez minutos.

Pero entre los aficionados al post rock, aunque fuera cantado en este caso y picaran también en demasía del folk y de los orientalismos vía Led Zeppelin, hay un público fiel que acude a los bolos con la actitud del que va a la iglesia los domingos, a orar y quién si sabe si a alcanzar algún tipo de crecimiento interior. Los barbudos se mezclaban con naturalidad con melenudos y no desentonaban en absoluto las hembras hipsters con gafas y vestidos de ‘La Casa de la Pradera’.

Con dos violinistas, contrabajo ocasional, un batería con pinta de ratón de biblioteca y el maestro de ceremonias Efrim recluido en una esquina, Thee Silver Mt. Zion Memorial Orchestra comenzaron a hacer ruido y amor con “Fuck Off Get Free (For The Island of Montreal)”, tema casi homónimo de su largo más reciente, un auténtico in crescendo en el que la reducida sección de cuerda cobra de inmediato importancia elevándose entre el marasmo guitarrero mantenido a raya sin que llegue a desbarrar.

Recuperaron el legado de la Velvet Underground más delirante en “Austerity Blues”, con una orgía de cuerdas impresionante cuando las dos violinistas se pusieron a rasgar sin piedad los violines distorsionados en plan noise. A veces incluso recordaban a los primerizos Genesis de Peter Gabriel por su misticismo y voluntad de trascender el plano material, de hecho, algunos espectadores parecían entrar en trance al cabecear ligeramente y casi poner los ojos en blanco. Ni un colocón de peyote.

Afloraba en las tablas el sentimiento de hermandad, de comunidad Amish separada del resto del mundo. Era tal la familiaridad que las violinistas tocaban descalzas y, pese a que Menuck llevaba la voz cantante, las aportaciones al micro se sucedían con naturalidad por parte de las dos chicas, que ejercían labores de coristas, como del batería, que llegaba a interpretar en solitario algunas estrofas. Nada de egos desmedidos.

Con el ambiente de pagoda oriental de “Take Away These Early Grave Blues” daban ganas de recluirse en un monasterio budista. Y es que la combinación de melodías exóticas con los acoples, delays y demás sonidos característicos del post rock era impagable, un bullicio aparente, pero en el que cada uno sabía perfectamente la tarea que debía desempeñar, cuando debería pararse todo para que el foco recayera sobre el contrabajo, o unos redobles de batería cambiaban de tercio de cuajo, así a la brava, cual hoja de afeitar.

La parroquia, muy seria y académica en un inicio, no tardó en despertar en los marasmos ruidosos, y para la tercera o cuarta de sus larguísimas canciones los silbidos y salvas de aplausos te podían dejar sordo. Uno de los momentos más emocionantes fue “What We Loved Was Not Enough”, con el tono lastimero de Efrim asemejándose al de Robert Smith, entonado con la desgana del tipo cansado del mundo material y que añora la armónica vida bucólica. Legaron un final de órdago con punteos mezclándose entre la nube ensordecedora mientras la letanía se perdía entre el acompañamiento coral.

Condescendieron con un único bis, “Rains Thru The Roof At The Grande Ballroom (For Capital Steez)”, un corte que trataba, según explicó el líder, acerca de las comunidades que viven tranquilamente hasta que viene la policía a repartir estopa, quizás en alusión a los últimos disturbios raciales en EE UU. De esta manera entroncaron con esa tendencia política que les atribuyen y de la que ellos reniegan al afirmar que escriben solo de “las cosas que hablan con los amigos”. Los temas de conversación habitual, ya se sabe.

Un recital de sentar cátedra ante el que cualquier intento de categorización resulta inútil, una especie de teoría del caos en la que unas pequeñas variaciones imposibilitan la predicción a largo plazo. Hace poco un estudio señalaba que los instantes más placenteros de la vida eran aquellos en los que no se buscaba algo deliberadamente, sino que venía a nosotros así de repente, caído del cielo. Y no mentían, el orden excesivo aburre.

Texto y foto: Alfredo Villaescusa

 

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Esta entrada fue escrita por Redacción

2 comentarios

  • Juandie dice:

    Muy buena banda rockera con aires hippies tanto en lo visual como en lo musical donde dejarón una muy buena sensación en su concierto bilbaíno en esa mitica sala donde han pasao grandes bandas tanto de nuestro país como de fuera además es de admirar al igual que el resto del grupo la gran labor que desempeñó la violista que se marco una digna actuación en algunas canciones.Si su música invita a fumarse algún canutillo y parecer estar en el espacio con su música habrá que pegarle una escucha a esta banda de nombre un poco largo!!!

  • PABLO SEPULVEDA dice:

    HOLA LES SALUDA RIKY QUISIERA SABER DONDE ESTABAN LOS CONJUNTOS LA LEY LOS BUNKERS CHANCHO EN PIEDRA MI DOBLE EL RAFA ARANEDA DEL FESTIVAL DE VIÑA LOS QUE SAQUE DEL BASURERO PARA SER ESTRELLAS EL TRATO NO FUE QUE HARIAN CAMBIO DE PAPEL DEJANDOME A MI EN SU SITIO, A NIVEL EXAMEN PSIQUIATRICOS DONDE ESTAN....SI NECESITAN AYUDA FORBES ME AVALA PARA QUE COMPONGAN CANCIONES QUE LOS TAPAN DE DOLARES Y LOS 50 MILLONES DE MUERTOS PRODUCTO DE CAMBIAR PAPELES GRACIAS PABLO,,

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